Hace ya más de un año que decidí dejar los tintes químicos y comenzar a usar henna, una planta llamada Lawsonia innermis cuyo poder de tinción se utiliza para cabello y piel. Para mi, ha representado el mayor de los cambios dentro del proceso del método Curly Girl.
En mi caso, cabello fino con porosidad baja, el cambio ha sido brutal. No solo ha dado cuerpo a la hebra, engrosándola, sino que ha eliminado rojeces y escozor en un cuero cabelludo sensible que ya estaba cansado de procesos químicos agresivos.
La henna pura proporciona una coloración cobriza, pero se puede mezclar con otras muchas plantas para obtener una paleta de colores tan amplia como la de cualquier marca de tintes comerciales. Es importante saber que no tiene la capacidad de tinción de un tinte químico al uso, ya que no penetra en la hebra, sino que se queda por encima, cubriéndola, por lo que el color obtenido depende del color de base y en ningún caso se puede aclarar el tono.
Al no tener químicos que obliguen al producto a penetrar en la hebra y acelerar el proceso, el tiempo de exposición es de, al menos, dos horas. Se aplica como cualquier otro tinte y sólo se mezcla con agua caliente o infusiones (la temperatura varía en función de las plantas que lleve la mezcla).
Si tienes muchas canas y quieres que el tono quede igualado, debes hacer doble coloración. Teñir primero con henna pura, enjuagar, y proceder a aplicar el color escogido a continuación. En mi caso, muchas canas pero pocas ganas de hacer dos pasos, decidí teñir con henna pura del Yemen de Namasté en una sola pasada, y el resultado es el que se puede ver en la imagen más abajo. Las canas son esos mechones que se ven cobrizos. A mi me encanta el resultado, no lo cambio por nada.
Es importante escoger una henna de calidad y certificada y sobre todo que no esté mezclada con metales pesados (sodium picramate, por lo general) ya que éstos pueden dar problemas a largo plazo, no solo en nuestro cabello, sino al volver a usar tintes químicos o decoloraciones si es que decidiésemos hacerlo.
Namasté, Khadi, Cultivators, Radico o Phitofilos son algunas de las marcas de calidad que pueden encontrarse fácilmente en comercios físicos u online en España.